lunes, 25 de octubre de 2010

LO QUE PIENSA LA LUNA


 La Luna se siente alienada, siempre sometida a la tiranía del Sol. Dice que no tiene luz propia, sino que refleja los rayos del llamado Astro Rey. “No soy más que un pálido reflejo suyo, recojo sus sobras y hago lo que buenamente puedo con ellas; me siento una administradora de residuos” se lamenta amargamente. No os dejéis embaucar por sus quejas, tiende a exagerarlo todo, nada en su vida es tan dramático como ella pretende y, por supuesto, su papel no es el de administrar las migajas de luz que desprecia el Sol, como ella quiere dar a entender, muy al contrario, el Sol emite energía, y la Luna la absorbe y asimila para luego abastecernos.

Luna de Niki de Saint Phalle

Así es, aunque no lo reconozca abiertamente, la Luna es muy consciente de su poder sobre el ser humano. Sabe cómo nos influye. No os dejéis atrapar por su falsa modestia, no es más que una de sus muchas artimañas, la gusta sentirse contemplada, ese falso victimismo es parte de un papel que ella representa la mar de bien. Todos sabemos que la Luna es ingeniosa, creativa, intuitiva, bella… pero tiene esa otra cara, menos afable, menos encantadora.


La Luna adora los ambientes de luz tenue, inciensos aromáticos, música romántica, de ritmos suaves, nada de estridencias. Da mucha importancia a la armonía tonal, pero también a las letras. Una de sus canciones favoritas es aquel antiguo tema de Rod Stewart, “Maggie May”, especialmente esta frase:


“The morning sun
when it's in your face
really shows your age”
(El sol de la mañana
cuando ilumina tu rostro
muestra tu verdadera edad).

Siempre que oye estas palabras dice: “¿Lo ves? El Sol no es bueno, puesto que es cruel, nos enseña las cosas tal cual son, sin delicadeza, sin suavizar. Eso no me gusta. Yo envuelvo todo de una neblina que difumina los defectos, ¿qué tiene de malo endulzar los sentidos? No es engaño, es compasión”. No podemos hacer nada, cuando la Luna se empeña en compararse con el Sol, siente siempre que acaba perdiendo y eso hace que el desánimo y la melancolía se apoderen de ella. El Sol se muestra tal cual es, en cambio la Luna siempre se reserva algo para sí. Por eso hay quienes la acusan de embustera, de engañosa. Motivos hay para ello.

Y es que la Luna está convencida de que hay una delgada línea entre la verdad y la mentira por la que ella puede pasearse sin problemas, siente que sus embustes no son tales, para ella son formas amables de disfrazar la verdad con un toque de imaginación. Ante todo, la Luna se siente creativa, su imaginación es inagotable. No alberga mala intención, ella es así. Prefiere ver todo a través de velos de gasa, que distorsionan la realidad haciéndola más amable, al menos ella lo cree así. “Es mejor siempre insinuar, nunca mostrar del todo”.

Hay que entender como siente y piensa la Luna. Ella representa nuestra parte más oculta, aquella que conecta con el subconsciente. Donde residen la intuición, las experiencias y emociones inexplicables que están más allá del razonamiento. Pero junto a este tipo de sensaciones, cohabitan aquellos miedos, ansiedades e inquietudes que se esconden en lo más profundo de la psique. Bien mirado, hemos de compadecer a la Luna pues con ambas corrientes tiene que lidiar y no es un equilibrio fácil de conseguir.

Tal vez se sentiría mejor si no se obstinase en compararse con otros Arcanos constantemente, no ya solo con el Sol. Intento convencerla para que se de cuenta del importante papel que cumple dentro del juego del Tarot, pero ella vuelve siempre a sus obsesiones habituales, una y otra vez me repite la misma cantinela:

“La responsabilidad es tan grande que a veces me siento abrumada. Si fuese la Estrella vería sólo lo bello del mundo y nada me inquietaría, puesto que para mí no existiría lo malo. Si fuera el Carro me lanzaría a la lucha, plantando cara a las contrariedades, nada me amilanaría, por el contrario, sería un fiero guerrero. Si fuese el Sol, sentiría que soy el centro y todo gira en torno a mí, así que nada ni nadie podría perturbarme. Pero soy la Luna, soy el Arcanos de la eterna duda, los grandes miedos y las respuestas difusas… ¡Qué desdichada me siento! ¡Qué gran carga sobre mis espaldas!”.

Por supuesto, ya cuento con sus estados de ánimo cambiantes. Cumple escrupulosamente sus ciclos vitales, jamás se salta uno. Cuando está en sus fases más amables, es fácil hablar con ella. Vemos que es dulce y encantadora, sensible y emotiva. Es creativa, aunque hay que reconocer que tremendamente inconstante. Pero es tan fascinante que casi todo se la perdona. En esos momentos se siente cómoda con su situación y hasta se muestra locuaz: “Me gusta sentarme por las noches y sentirme en el cielo; ver sin ser vista, observar todo lo que sucede a mi alrededor y tomar buena nota de ello. La oscuridad tiene más vida de lo que muchos creen”.



En esos momentos es una delicia hablar con ella. Conoce miles de historias tras tantos siglos de observación silenciosa; su especial sensibilidad hace que su forma de relatar sea amena, no quieres dejar de escuchar sus historias. Pero es inevitable que un ciclo siga a otro ciclo, y la Luna tiene otras fases, menos amables. Cuando llega su momento más oscuro, es cuando se reviste con esa dura coraza y se oculta de los demás, cuando su extrema sensibilidad deviene en paranoia. Sus emociones se transforman en pasiones oscuras y descontroladas. Esa es la Luna rencorosa y acobardada. Entonces, su conversación ya no es amena, es un lamento constante y yo prefiero alejarme discretamente, esperando que pase ese ciclo y vuelva a ser la Luna que aprecio y valoro.

4 comentarios:

  1. Gracias por este texto. Me ha ayudado ha comprender mejor el arcano de la luna. ¿Podría decirme algo sobre la imagen de la luna de Niki de Saint Phale? Me ha parecido fascinante, no había oido hablar de ella.
    Mis felicitaciones por el blog
    Sybila

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  2. Hola Sybila

    Te agradezco tu comentario. Esa es precisamente la intención del texto: entender cómo es cada arcano de tal modo que utilicemos más la imaginación que la memoria. Me alegra infinitamente cuando alguien me dice que lo que escribo sirve para conocer mejor el Tarot.
    En cuanto a la imagen a mí me ha pasado lo mismo, me impactó nada más verla. Forma parte de la obra de una escultora que ha dedicado más de 15 años a crear un Tarot gigantesco en la Toscana (Italia). Te sugiero que estés atenta porque en breve voy a dedicarle una entrada.

    Saludos y nos leemos :)

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  3. ¡Que lindo acercamiento a la luna! Gracias por compartirnos y bendiciones
    Noelia Villa

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  4. Gracias a tí, Noelia, por leerme y por tus buenos deseos

    Espero que sigamos leyéndonos. Saludos

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