viernes, 23 de abril de 2010

PRACTICANDO CON LA TIRADA DE PASADO-PRESENTE-FUTURO

Leer el Tarot es un arte y como tal, la práctica se hace imprescindible. Podemos tener capacidades innatas, pero hay que trabajar para desarrollarlas. Te pueden regalar una planta, pero si no la colocas en un lugar apropiado para sus características, la riegas, abonas, podas cuando es necesario y en la época adecuada, vigilas las posibles plagas, en resumen, si no la dedicas un tiempo y un esfuerzo, la planta acabará enfermando o muriendo. Con el Tarot pasa lo mismo, si no se practica y se alimentan los conocimientos, estos se estancarán y acabarán cayendo en el olvido.

Por eso es muy importante practicar de forma regular; puede que no tengas ninguna consulta pendiente, o que no haya ninguna pregunta concreta que te interese hacer a las cartas, no importa, inventa, imagina situaciones ficticias y luego consulta a las cartas sobre ellas, este ejercicio te ayudará a adquirir soltura y, sobre todo, a estrechar tu relación con las cartas. Cada tirada, aunque no sea real, hace que conozcas un poco más el mecanismo del Tarot. Cuantas más tiradas hagas, más fácil te resulta relacionar unas cartas con otras, tu agudeza para leer entre líneas se afinará y serán más espontáneos tus destellos de intuición.


Piensa en un consultante ficticio al que pones nombre y cara. Imagina una situación real, algo creíble y cotidiano, trata de sentir empatía hacia tu personaje y deseos de ayudarle. Después, formula la pregunta. Vamos a imaginarnos a Ramón, pongamos el rostro que queramos, durante el tiempo que dure el ejercicio otorguémosle vida propia. Que no sea simplemente un nombre cualquiera. Visualicemos a Ramón ante nuestros ojos.

Veamos que tiene una estatura concreta, una edad, ¿cómo viste? ¿de qué color son sus ojos? ¿tal vez lleva barba? ¿gafas? Su complexión ¿es ancho, delgado? A la vez que este ejercicio nos beneficia para practicar nuestras lecturas de Tarot, también nos ayuda a adquirir más plasticidad mental, algo que será muy útil a la hora de realizar ejercicios de visualización. Como puede comprobarse, esta práctica es positiva en muchos sentidos.

No nos conformemos con otorgar a nuestro consultante ficticio únicamente un físico, vamos a darle también una vida: una familia, un trabajo, unas inquietudes… Una vez completado el personaje, veamos qué quiere saber, en este caso, Ramón. Recordemos que la pregunta tendrá que armonizar con el tipo de tirada que deseemos practicar. En este caso la tirada es de Pasado - Presente – Futuro, por lo tanto no haremos preguntas complejas ni que abarquen distintas áreas de la vida de Ramón, existen tiradas para esa clase de cuestiones. La tirada en cuestión es para preguntas muy concretas y específicas, así que a ellas nos ceñiremos.

Imaginemos que Ramón trabaja en una gran compañía como administrativo de rango medio, quiere presentarse a una promoción que próximamente se va a realizar dentro de la empresa con vistas a cubrir varios puestos por vacantes. El aspira a subir de categoría puesto que tiene antigüedad, experiencia y conocimientos, pero no está seguro de conseguirlo, tiene 52 años y teme que la empresa prefiera promocionar a gente más joven y dinámica. Una vez que Ramón nos ha contado su situación e inquietudes, ya tenemos la pregunta concreta ¿conseguirá promocionarse?

En la vida pasan cosas buenas y cosas menos buenas, así que en nuestras tiradas nos vamos a encontrar dando buenas noticias y noticias que preferiríamos no dar, aunque siempre con matices, porque hay veces que lo que aparentemente resulta ser negativo, a la larga resulta mejor. Vamos a ver dos ejemplos para responder la cuestión que plantea nuestro amigo imaginario. En uno de ellos, vamos a darle buenas noticias, en el otro no, pero veamos como podemos afrontar ambos casos.

En la primera tirada, nos aparecen las siguientes cartas:
De modo que tenemos al Carro en el Pasado, a la Estrella en el Presente y al Juicio en el Futuro. El panorama general es ciertamente alentador. A simple vista nos encontramos ante una lectura bastante positiva. Sin duda vamos a darle una alegría a Ramón. Pero analicemos las cartas una por una:

El Carro en el Pasado. Nos está indicando que Ramón ha sido un trabajador que se ha esforzado, lo que ha conseguido lo ha ganado a pulso y ha llegado al puesto que ha llegado por méritos propios. Haciendo un símil deportivo, Ramón está en la parrilla de salida para esa promoción por su esfuerzo, y sale con ventaja, puesto que esta carta habla, además de esfuerzo y empuje, de dinamismo, esto quiere decir que en la vida laboral de Ramón se están gestando movimientos desde hace tiempo (recordemos que esta carta está en el Pasado).

La Estrella en el Presente. Ya hemos visto de qué situación parte Ramón y es una situación positiva y dinamizante, ahora nos encontramos con “el hada madrina” del Tarot. La Estrella domina el presente de nuestro consultante, dotándole de fe y de esperanza, y esa es una muy buena base, ya sabemos que “creer es crear” y Ramón cree en sus posibilidades sin lugar a dudas. Recordemos que la convocatoria para promocionar se va a realizar más adelante no en el presente, es fundamental tener claros los tiempos en el Tarot. Esto quiere decir que la Estrella no es la carta que le dice que lo va a conseguir puesto que habla del ahora, lo que le dice es que se siente preparado y como esta carta protege y beneficia los proyectos, favorece los planes y allana los caminos, nos está indicando que, no sólo Ramón está preparado, si no que su candidatura probablemente ya está siendo tenida en cuenta, recordemos además, que el Carro nos dijo que Ramón está donde está por méritos propios, la Estrella nos dice que este dato no ha pasado desapercibido y quienes van a realizar la selección tienen un alto concepto de Ramón.

El Juicio en el Futuro. Y llegamos al momento cumbre para Ramón, esta carta ya sí es una predicción, teniendo en cuenta el empuje del Carro, los buenos auspicios de la Estrella y viendo que el resultado es el Juicio, podemos tranquilizar a Ramón al respecto de su futuro laboral (aunque la Estrella nos ha dicho que él ya estaba seguro), lo va a conseguir sin lugar a dudas. El Juicio es una carta muy interesante cuando buscamos un cambio en nuestra vida, abrir una nueva etapa. Y eso es precisamente lo que busca Ramón: un nuevo puesto que supone un cambio sustancial en su trayectoria profesional. El Juicio asegura la renovación y el cambio que estamos buscando y, aunque las cartas precedentes apuntaban a la consecución de dicho cambio, el Juicio lo confirma totalmente.

Como se puede ver, esta es una de esas tiradas que nos gustan especialmente. Todo es positivo, maravilloso y el final es feliz. Pero por desgracia la vida está compuesta de claros y oscuros y muchas veces las cosas no salen como nos gustarían. Ahora vamos a ver otro ejemplo en el que las cartas para Ramón van a resultar bastante menos agradables. La pregunta va a ser la misma, pero vamos a realizar la misma tirada con las siguientes cartas:


En esta nueva tirada encontramos en primer término al Ermitaño invertido en el Pasado, el Loco en el Presente y la Fuerza invertida en el Futuro. Un vistazo general ya nos da a entender que la situación no va a resultar nada fácil. Hagamos un análisis carta por carta.

El Ermitaño invertido en el Pasado. Con esta carta partimos de una situación poco favorable. Esta carta nos indica que Ramón no es muy dado a trabajar en equipo, tampoco vemos que su mente sea flexible y dinámica a la hora de enfrentar nuevos retos, el Ermitaño invertido se aferra al pasado y desprecia lo nuevo, no parece que sea una actitud muy adecuada para progresar profesionalmente. La experiencia que podría reflejar el Ermitaño, al aparecer invertido, se convierte en un lastre, no en un factor favorable.

El Loco en el Presente, si bien esta carta puede ser creativa y dúctil, al venir precedida por el Ermitaño invertido, parece que muestra su cara menos amable y se centraría más en sus aspectos de inconsciencia y de irresponsabilidad. En este punto, podríamos insinuar a Ramón que quizás no esté siendo consciente de que su falta de flexibilidad le puede cerrar puertas de cara a un ascenso. El Loco nos está indicando que a Ramón o bien no le importa este hecho o bien no es capaz de ser consciente de él. Nuestra misión aquí, no es resaltar sus defectos, sino intentar enfocar la atención de Ramón en un hecho vital para él: la desidia ante sus propias carencias le puede perjudicar.

La Fuerza invertida en el Futuro. Esta carta no trae grandes alegrías. Estando invertida, los resultados, que en posición normal son exitosos y potentes, se truncan; esa fuerza que es casi imparable, se vuelve en contra de uno mismo, por eso, especialmente en temas laborales, la Fuerza invertida trae conflictos con los compañeros y también impide progresar profesionalmente. Con las perspectivas que nos muestran estas tres cartas, parece que la promoción laboral de Ramón se complica bastante.

Ahora bien, mi pretensión con el Tarot es que se puedan prevenir errores y que tomemos conciencia de nuestras limitaciones, no para frustrarnos con ellas, sino para sortearlas o enfrentarlas. Una vez que hemos entendido el mensaje que nos transmiten estas tres cartas, comienza la verdadera labor de quien lee el Tarot, y es ayudar al que consulta a abrir los ojos, no se los abrimos, sino que le ayudamos a que sea él quien los abra. Es importante captar la diferencia de estos dos conceptos. Nuestro papel es ofrecer alternativas y avisar de peligros, las decisiones no deben ser nuestras, sino de quien las debe tomar, que es el consultante, en este caso, Ramón.

Conviene que expliquemos a Ramón lo que el Ermitaño invertido y el Loco nos han dicho, que entienda que la Fuerza es lo que puede suceder si persiste en su actitud y que el futuro siempre está por escribir, por lo tanto en esta tirada solamente hay una carta que no tiene tanta validez como las otras y es la que representa el Futuro. El Pasado ya está y no se puede cambiar, solo podemos cambiar nuestra forma de pensar en él. El Presente está sucediendo y es tan inmediato que rápidamente es Pasado, pero el Futuro está por llegar, las cartas nos dicen lo que pasará teniendo en cuenta que se continúe con la tendencia que marcan las dos primeras cartas, si dicha tendencia se cambia, cambiaremos a su vez el Futuro.

Por supuesto Ramón puede o no reconsiderar su actitud. Tal vez ese ascenso al que aspira no sea tan maravilloso como el pensaba y a la larga le hiciera infeliz, puede que no sea el momento adecuado simplemente y más adelante se presente una oportunidad distinta o mejor, tal vez por cuestiones de Karma, Ramón tiene que pasar por esta experiencia… Pero hay una cosa clara, y es que las dos primeras cartas hablan de un enfoque no muy feliz de su trabajo, si Ramón consigue tomar consciencia de ello, la tirada habrá resultado positiva, aún cuando el resultado que se esperaba no se ha conseguido.

Os animo a que practiquéis las tiradas con cierta regularidad, aunque sea con personajes no reales, no importa, la práctica hace al maestro.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Te informo que los datos personales que proporcionas al rellenar este formulario tienen como única finalidad gestionar los comentarios, por lo que no son recogidos ni guardados en ningún fichero.
Más información en la página de Aviso legal y Política de privacidad.