Una inmensa rueda naranja preside esta carta. Las cuatro esquinas están decoradas con las figuras del llamado Tetramorfos de Ezequiel: un Hombre alado, como si fuera un Ángel, en la esquina superior izquierda, según vemos la carta, que representa el signo de Acuario y por lo tanto el Aire, un Águila en la esquina superior derecha es el signo de Escorpio, Agua, un Buey alado en la esquina inferior izquierda es el signo de Tauro, Tierra y por último un León también alado en la esquina inferior derecha que es Leo, Fuego. Representan los cuatro elementos y a su vez a los cuatro evangelistas: Hombre-Ángel: Mateo, León: Marcos; Toro: Lucas y Águila: Juan.
Sobre la rueda encontramos una esfinge azul, la mitad superior de su cuerpo pertenece a una mujer, la parte inferior a un león, evocando ligeramente esta figura los dos elementos principales del Arcano de la Fuerza; la esfinge sostiene una espada en alto, es el símbolo del Aire, el intelecto y más en concreto de la discriminación, condición necesaria para comprender los ciclos cambiantes que representa la rueda, sólo podremos aprovechar la corrientes favorables si aprendemos a distinguir estas de las desfavorables.