Meditar sobre los Arcanos es una de las aplicaciones más productivas que yo encuentro en el Tarot. Cada figura representa una serie de cualidades y virtudes que, gracias al trabajo meditativo, podemos intentar desarrollar en nosotros. Por supuesto, que nadie se engañe, es un trabajo que requiere constancia y paciencia. Los resultados son acumulativos, a largo plazo y sólo se verán los frutos si el trabajo es firme, serio y continuado.
Tradicionalmente se han asignado a cada uno de los Arcanos Mayores determinados valores, por supuesto una de las partes más importantes de este trabajo va a consistir en averiguar qué significan para nosotros personalmente. Por poner un ejemplo, el Emperador se asocia con los valores de orden y estabilidad, pues bien, tal vez a mí el Emperador también me sugiera protección, porque siento que es una carta que protege al débil ya que me transmite fuerza, arrojo, liderazgo y determinación. Bien, entonces puedo añadir ese significado a los ya existentes del Emperador, tal vez para otra persona sea otra carta la que represente la protección, por ejemplo la Fuerza, nada es correcto ni incorrecto, se trata de un trabajo muy subjetivo. Lo importante es encontrar aquellos significados personales de cada carta, pues será con ellos con los que vamos a trabajar.