En Alemania el Tarot arraigó del mismo modo que en otros países europeos. Pero la fecha de su introducción es difícil de saber. Hay constancia de que el mismísimo Durero, reprodujo algunas imágenes tomadas del Tarot de Mantegna, pero este dato no sirve de mucho ya que esos grabados se cree son de principios del siglo XVI y no consta que hubiera producción en aquella época, como tampoco hay documentos que hagan referencia al uso de las cartas como juego de entretenimiento.
Los primeros nombres de editores de cartas que se conocen son Johannes Mayer en Baden-Württemberg y Sebastian Heinrich Ioia en Augsburbo; ambos trabajaron en la primera mitad del siglo XVIII. A mediados de siglo, aparece en Estrasburgo una baraja de Tarot francamente distinta a todo lo que se había hecho antes. Constaba de sus Arcanos Menores, que eran unos naipes corrientes de la baraja francesa, es decir, los palos son Diamantes, Corazones, Picas y Tréboles.