Tarot Morgan Greer |
Resulta inevitable, a la vista de la balanza que porta la figura que protagoniza esta carta, pensar en la Ley del Karma, la justa retribución, la Ley Hermética de la Causa – Efecto, por la que se nos dice que somos responsables de nuestras propias acciones y decisiones, lo que nos otorga una autonomía vital absoluta, puesto que asumimos nuestro libre albedrío. Es ni más ni menos que la constatación de que somos seres verdaderamente libres. Realmente no dependemos de nada y de nadie, salvo de nosotros mismos. O al menos así debería ser. Somos nosotros los que, por distintos motivos, optamos por encadenarnos a ideas, personas, cosas, pensamientos, situaciones, etc. que nos apresan y restan libertad.
Ese es el mal uso que hacemos de nuestro libre albedrío. Tenemos la capacidad para elegir sin imposiciones, somos nosotros quienes erramos o acertamos en la elección. Entonces es cuando viene la consecuencia de la opción tomada. Del mismo modo que hemos escogido un camino u otro, hemos de asumir las consecuencias que se derivarán de dicha toma de decisión. Para bien o para mal. Esta es la Justicia, con mayúsculas, la Ley que equilibra las corrientes energéticas en el Universo.