"El TODO es Mente; el universo es mental".
Esta es la primera Ley Hermética y, en cierto modo, este principio resume todo lo que es Magia, es la base de la filosofía hermética, todo es mental, somos producto de nuestra mente. Todo aquello que nos pasa, todas las cosas con las que nos encontramos a lo largo de nuestro camino, sea para bien o para mal, provienen de nuestra mente. La sustancia que todo lo compone es mental. Desde la más minúscula bacteria hasta el más complejo sistema planetario, todo absolutamente existe en la mente del TODO.
Así pues la sustancia única sería la mental, esto quiere decir que pensamos a la vez que somos pensados. ¡Qué lío!, ¿verdad?. Este principio puede parecer demasiado complicado, pensar en sus implicaciones realmente da cierto vértigo, pero por otro lado resulta prometedor ya que esto significaría que al ser todo mental, la creación es también mental, por lo tanto el cambio de aquellas condiciones que no nos gusten o convengan, será mental puesto que crearemos mentalmente otras que sustituyan a las originales.