Dejamos atrás
las cartas numerales del palo de Espadas y llegamos a las de la Corte. Quiero
recordar en este punto, que estos Arcanos no representan exclusivamente a
personas, con determinadas características físicas y de carácter, también
pueden representar situaciones y eventos determinados, y es por medio de la
práctica y el desarrollo del proceso intuitivo que podremos ir distinguiendo dentro
de una tirada, en qué momentos representa a personas y en cuáles nos está
hablando de circunstancias.
Dentro del
palo de Espadas, de entre estas cuatro cartas, Sota, Caballo o Caballero, Reina
y Rey, se distinguen las dos primeras como dinámicas, de acción, algo que se
refleja en la posición del cuerpo. Hoy hablaré de la Sota de Espadas, una carta
que, por fin, escapa del tenebrismo de las últimas revisadas. Ya no hay fondos
oscuros, situaciones tenebrosas y dolientes; dominando el campo visual de la
carta, vemos la figura de un joven al aire libre, con su coletita al viento,
blandiendo su espada en una actitud vigilante, como si estuviese preparado para
actuar en cualquier momento.
Y esta es una
de las ideas principales que nos transmite la carta: el estado de alerta
vigilante.