Si tienes algún problema, no sabes que hacer, tienes
dudas sobre qué camino es el más adecuado… no dudes en acudir a esta Reina,
porque es calculadora, metódica, resolutiva, tiene recursos y toma decisiones
sin que su pulso tiemble lo más mínimo; ahora bien, no esperes una palmadita en
la espalda, ni una palabra de ánimo afectuosa, eso no lo encontrarás en ella,
pues su empatía emocional oscila entre el cubito de hielo y el casquete polar.
Para esos asuntos, mejor acudir a la Reina de Copas, que es afectuosa y cálida,
y puede que no te resuelva gran cosa, pero confortará tu espíritu.
Encontramos a la Reina de Espadas sentada en su imponente
trono, con la espalda recta, sosteniendo en su mano derecha una espada de
considerables dimensiones mientras su mano izquierda se alza con la palma
abierta. El cielo es de un azul limpio y claro, pero espesos nubarrones ocupan
la parte inferior. Tras ella vemos unos árboles lejanos junto a un pequeño
riachuelo. Es una imagen regia, que transmite seguridad y solidez. Son estas
características las que definen la personalidad de esta carta. Como ya he
comentado, no es afectuosa, sino resolutiva. No olvidemos que estamos en el
palo mental, y la Reina lleva hasta las últimas consecuencias la exaltación del
intelecto.